domingo, 26 de octubre de 2014

Requerimientos funcionales en el diseño grafico



El diseño gráfico desarrolló sus elementos esenciales en los años ‘20 y llegó a obtener su perfil actual en los años ‘50. En efecto, desde aquellos años el objetivo del diseñador dejó de ser la creación de una obra artística y pasó a ser la construcción de una comunicación eficaz.
Una pieza de diseño cumple eficazmente con su función, en la medida en que es capaz de provocar una estimulación capaz de atraer y también de retener la atención.
Esto quiere decir dos cosas:
a) Para atraer, la pieza de diseño debe producir un estímulo visual suficientemente fuerte como para emerger del contexto en el que se encuentra. El diseñador podrá lograr esta emergencia mediante el uso de contrastes entre forma, contenido y tema, y el significado de la imagen debe relacionarse con los intereses del receptor. En otras palabras: la pieza de diseño debe funcionar como un llamado de atención. El diseñador gráfico sabe que hay que atraer la atención del público mediante “gritos visuales”.
b) Pero la comunicación no sólo consiste en llamar la atención, sino en transmitir mediante ese llamado, un mensaje con un contenido determinado. Para eso es fundamental la retención. Este es un punto difícil, que exige del diseñador una delicada consideración de las peculiares características del público al que se destina el mensaje que está diseñando. En efecto, para asegurar la retención, el significado de la imagen debe atraer la atención, pero relacionándose con los intereses del receptor.



En términos didácticos, la capacidad de atracción y retención guarda relación con los así denominados contenidos autorreferenciales.
Los contenidos autorreferenciales son aquellos claramente referidos a aspectos socio-culturales, histórico-afectivos e ideales del grupo de pertenencia del destinatario del mensaje. Esos contenidos lo ayudan para que pueda reconocerse en el mensaje desde su propia identidad. Son muy importantes, porque las autorreferencias son la materia prima sobre la que se metaboliza lo nuevo. Cumplen la función de unión entre lo desconocido que se nos presenta y lo familiar en lo que nos reconocemos.
Un caso en el que estas consideraciones tienen una especial relevancia, es en el del diseño pensado para educación.
De acuerdo con lo expuesto hasta el momento, podemos ver que el campo de trabajo del diseñador gráfico está definido por un eje que une información con persuasión.


No hay comentarios:

Publicar un comentario