Concepto creativo es la parte fundamental de todo diseño es
la idea básica para el desarrollo de cada
proyecto gráfico. La conceptualización para cada proyecto define el
éxito o fracaso de lo que se promocione
o de una determinada marca, por lo que a través de este debemos proyectar un mensaje significativo,
una idea, un sentimiento etc. que pueda llamar la atención del público generando
grandes expectativas y ganancias o todo lo contrario; depende de la creación,
creatividad y su desarrollo.
“El concepto, es la abstracción que se conserva en nuestra mente, que
condensa y define toda nuestra imaginación, experiencias,
vivencias, ideas o discernimiento, todo ese flujo de información ordenada por
nuestro intelecto hace que dicho concepto sea comprensible y tenga significado
formal.”
En definitiva es generar un concepto
que “llame la atención”. Que dependerá de lo que hagamos
para transmitir lo que queremos. Aquí es donde las agencias de publicidad; sus
creativos deben emprender ideas ingeniosas e innovadoras para causar revuelo y
obtener un buen resultado de trabajo e inspiración, los conceptos creativos son
los que finalmente llegan a los consumidores en los anuncios, buscando
captarlos y despertarles alguna emoción que permita el consumo del producto. Es
indispensable conocer parte del desarrollo para obtener un concepto creativo
exitoso, entre los más importantes puntos están:
Investigación y Familiarización
El estilo y el
contenido de un brief puede ayudar a producir ideas y
también proporcionan un punto en el que centrar los objetivos publicitarios; a
quién nos dirijamos, qué queremos decirles y cómo esperamos que reaccionen. Por
esta razón, es importante consultar una y otra vez el brief a menudo
durante el proceso creativo, para asegurarnos de que estamos en el buen camino.
Cuando se tiene una buena idea es fácil entusiasmarse con ella, pero se corre
el riesgo de desviarse del verdadero propósito de la publicidad.
La
clave para tener una buena idea se encuentra en la preparación de las primeras
etapas del proceso. Esta preparación supone la búsqueda del máximo de
información posible acerca de un producto o servicio y de las partes
interesadas; desde quienes producen o venden el producto, hasta quienes
pueden querer comprarlo o utilizarlo.
A
través de diferentes formas podemos ser capaces de empezar a hablar sobre él
ante el público.
Búsqueda de detalles
interesantes
No
es descabellado decir que “los hechos venden, las generalizaciones no” Debemos
encontrar hechos interesantes sobre él producto o el servicio, para poder tener
luego aquella luz que transmite el mensaje de forma original, inesperada y poderosa.
Conocer al público
¿Cómo
le hablarías?, ¿Qué le interesa?, ¿Qué hábitos?, ¿Qué comen?, ¿Que
espera?, ¿Cómo besa?, ¿Usa Coche?, ¿Color Favorito?, etc., absolutamente
TODO acerca del Público objetivo, entre más conozca este Grupo Objetivo, más
respuestas obtendrá, para poder buscar las palabras, imágenes, titulares
adecuados y lo más importante finalmente “SORPRENDERLO” con el mensaje.
El Factor sorpresa
Una
característica común a todas las grandes ideas publicitarias es la
incorporación del factor sorpresa o los elementos inesperados en relación con
el concepto, desde el tono o estilo “Lo inesperado”, otras factores
importantes,
En conclusión la presentación del concepto creativo debe ser cautivadora, innovadora y objetiva quedando así en la retina del consumidor, provocando el sentimiento de deseo de compra al mismo; es así como un buen planteamiento del concepto nos lleva al éxito del producto, servicio o de la marca.
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